February 24, 2011

WAIHEKE ISLAND, New Zealand

PLACES. If you happen to be around, take the ferry from Auckland Harbour to Waiheke Island in the middle of Auckland Bay. It is really close, people commute from the island to work in the city.
We did stay at the Lavander Hill, a place with 3 or 4 rooms only, that was all, and the feeling that you could be in Provence but for the added magic of the very small island. A single narrow road goes around, with vineyards and cellars in every corner. I have worked in the wine business many years and I had never seen anything like that.
Go and visit Goldwater State and have a glass of good wine there. I had met Kim and Jeannete Goldwater in France at a dinner at Chateau Lafite with the Baron de Rothschild, and then I visited them in Waiheke once. They might remember me but, by now, they have probably left the day to day business to their daughter and will not be around.
Si sucede que estás por ahí, toma el ferry del puerto de Auckland a Waiheke Island, en el medio de la bahía de Auckland. Está realmente cerca, la gente va y viene a diario a trabajar a la ciudad.
Nosotros estuvimos en el Lavander Hill, un lugar de 3 o 4 habitaciones, eso es todo, y la sensación de estar en la Provence si no fuera por la magia especial de estar en una pequeña isla además. Una sola carretera estrecha rodea la isla, con viñedos y bodegas en cada esquina. He trabajado en el mundo del vino muchos años y nunca había visto nada igual.
Si vas, visita Goldwater State y tomate una copa de buen vino. Conocí a Kim y Jeannete Goldwater en Francia, en una cena en Chateau Lafite con el Baron de Rothschild, y luego les visité en Waiheke una vez. Puede que se acuerden de mi pero probablemente habrán dejado el día a día de la bodega a su hija ya y no estarán por alli. 

2 comments:

  1. Jo, es que recomiendas cada lugar "casi imposible" que se me ponen los dientes largos y siento que de un momento a otro me van a salir alas para salir volando...

    ReplyDelete
  2. No tenía ni idea de que Nueva Zelanda fuese tan vinícola. Qué ignorancia la mía... Además de por esos paisajes y bodegas que describes, es un lugar que me gustaría visitar por echarle el ojo a algún maorí tatuado. Puro interés antropológico por los tatuajes, eh. (jejeje) Pero como dice Mery, un viaje casi imposible. :-(

    ReplyDelete