FLORIDA. The day was warm and humid. The sky of a darker and darker grey and the sea of a paler and paler green while we left the Keys towards Miami. By the time we arrived at South Beach it rained in heavy tepid drops. We managed to find a parking space in the slow heavy traffic of Ocean Drive in the mix of lights and water of the late evening. All the terraces were being covered in plastics of dripping water over the restaurants tables. At the Waldorf (Ocean Drive & 9th) we were offered a Margarita at the bar while we waited for a dry table to be placed in a reasonably dried spot under the canopy, by a gas fire. The Margaritas, frappés, were best of the world, so was the food. It was Christmas Day too, all the crowds out there to celebrate somehow, under the orange neon signs of the Hotel.
We arrived there by chance but a couple of days later we were still dining there - pasta with cream sauce and three types of mushrooms, more Margaritas and a bottle of Moscato too. Couldn't be just chance.
A table was laid out for we eight, children and all, after a day in the beach flying the kite, laying in the blue mattress-ed white toweled hammocks, the always waved ocean a pale green there too, the water warm.
I made a promise to be back, someday for more at the Waldorf, so nice they were to us on a rainy day.
El día era cálido y húmedo. El cielo de un gris más y más oscuro y el mar de un verde más y más pálido subiendo de los Cayos hacia Miami. Para cuando llegamos a South Beach llovía en forma de pesadas gotas tibias. Conseguimos encontrar un lugar para aparcar en el tráfico lento y pesado de Ocean Drive y la confusión de luces y agua del atardecer. Todas las terrazas estaban siendo cubiertas en plásticos goteando agua sobre las mesas de los restaurantes. En el Waldorf (Ocean Drive & 9th) nos ofrecieron tomar una Margarita en el bar mientras esperabamos a que nos prepararan una mesa seca en alguna esquina razonablemente seca bajo el toldo, junto a un quemador de gas. Las Margaritas, frappées, resultaron ser las mejores del mundo, y también la comida. Era el día de Navidad también, todo la gente en la calle para celebrarlo, de alguna manera, bajo las luces de neon naranja de los rótulos del hotel.
Llegamos allí por azar pero que dos días más tarde continuáramos allí cenando - pasta con salsa de nata y tres tipos de setas, más Margaritas e incluso una botella de Moscato - no podías ser solo casualidad.
Nos prepararon una mesa para 8, niños y todo, después de un día en la playa volando la cometa, tumbados en las hamacas de colchón azul y toallas blancas, el océano siempre de olas, de un verde pálido también allí, el agua caliente.
Me hice la promesa de volver, algún día por más al Waldorf, nos trataron tan bien en un día de lluvia.
C&S, companions in the Christmas Day dinner.
C&S, compañeros en la cena del día de Navidad.
Beautifully written...your words transported me to Miami for a moment in time!
ReplyDeleteSounds like a wonderful Christmas and good wishes for 2014, Pet. x
Todo suena fenomenal. Feliz año para ti y los tuyos :)
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